Thursday, December 14, 2017

manchas de sangre

Ayer Malalo llegó a casa con unas enormes manchas de sangre en la camisa, a la altura y abajo del corazón. Se había puesto encima el guardapolvos del laboratorio, que también se había manchado. Vino derecho desde una reunión de profesores, donde nadie, nadie le dijo ni una palabra Ni siquiera un comentario.

Dado que lo conozco, el susto me duró 30 segundos. Como es de imaginarse, se puso la lapicera de corregir, abierta y con la punta para abajo. Todavía estoy lidiando con las manchas en la camiseta. Lo demás, a la basura.